Alter ego
Ya no recuerdo en qué película una mujer le decía a James Stewart:
- Me enamoré de tu nuca.
- ¿Y qué pensaste cuando me di la vuelta?
- Pues que me tendría que acostumbrar a tu cara.
Creo, más o menos, que le decían algo así. No me gustó el día que se murió James Stewart. Por tener, Historias de Filadelfia tiene a mis tres actores: a James Stewart, a Cary Grant y a Katharine Hepburn. Y la condenada hija de su madre de la niña. En Vértigo no se ve, pero tiene que desnudar a Kim Novak para meterla en la cama cuando la rescata del agua. Menuda. En La ventana indiscreta es un mirón. Sólo le faltó bailar como Fred Astaire.
Baila, mal, en Qué bello es vivir. En Qué bello es vivir es sordo del oído ¿izquierdo o derecho? Y entonces la niña que hace de Donna Reed de pequeña le dice que te quiero en esa oreja. En El invisible Harvey cuando está borracho habla con un conejo gigante. En Anatomía de un asesinato le gusta tocar el piano sentado enfrente del mismo piano que Duke Ellington. Y no mató a Liberty Valance.
Alguien, un día, me llamó Jimmy.
2 comentarios
Enrique -
Zoe -
Buen fin de semana.